En las últimas décadas hemos oído hablar cada vez más de la descarbonización, especialmente en el contexto de la sostenibilidad y el cambio climático. Pero, ¿qué significa realmente este término? ¿Por qué es tan importante para las empresas y, en general, para la sociedad? En este artículo vamos a desglosarlo de manera sencilla y clara, para que todos podamos entender cómo la descarbonización impacta en nuestro entorno, las empresas y nuestras vidas cotidianas.
Descarbonizar consiste en reducir o eliminar las emisiones de carbono (principalmente en forma de dióxido de carbono, CO₂) en nuestras actividades económicas y productivas. Esto se debe a que el CO₂ es uno de los principales gases de efecto invernadero responsables del calentamiento global y del cambio climático.
Para que la descarbonización global a largo plazo sea factible y completa, es importante respetar el siguiente orden de actuaciones:
La descarbonización tiene una importancia crucial por varias razones pero, en resumen, se trata de un compromiso con el futuro. Vamos a ver por qué:
Si bien la descarbonización es crucial para la sostenibilidad global, también tiene un impacto directo en las empresas. Veamos algunas de las razones por las cuales las empresas deben tomar medidas en este ámbito:
A medida que la Unión Europea y los diferentes gobiernos adoptan políticas más estrictas para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero, las empresas deben adaptarse a estas numerosas regulaciones como:
Cumplir con estas normativas, más allá de ser una obligación legal, es también una oportunidad para liderar el cambio y evitar sanciones.
Para ayudar a las empresas a cumplir con las normativas y fomentar la transición energética, las autoridades públicas incentivan dichas iniciativas y actuaciones a través de programas de subvenciones a fondo perdido, préstamos, desgravaciones fiscales, etc.
Por otro lado, la sostenibilidad es un criterio fundamental para los inversores. Debido a la presión de la sociedad cada vez más fuerte, los fondos de inversión y los bancos están comenzando a dar preferencia a las empresas que tienen una estrategia clara de descarbonización. Acceder a financiación verde por el cumplimiento de los objetivos de descarbonización es una excelente manera de potenciar el crecimiento y las oportunidades de negocio.
A largo plazo, las inversiones en energías renovables y en la eficiencia energética pueden generar ahorros significativos. Por ejemplo, las empresas que invierten en paneles solares, en sistemas de eficiencia energética o en la reducción de residuos pueden ver una reducción de sus facturas de energía y otros costes operativos.
Además, la dependencia de energías más económicas y abundantes puede disminuir la vulnerabilidad a los precios volátiles de los combustibles fósiles.
La descarbonización forma parte de la responsabilidad social de las empresas. Ser conscientes de su impacto ambiental y actuar de manera responsable es una forma de mostrar compromiso con el bienestar de la sociedad y del planeta.
Esta práctica además de mejorar la imagen de la empresa, genera un mayor compromiso entre los empleados, clientes e inversionistas.
Al adaptarse a prácticas sostenibles, las empresas se preparan para un futuro donde la sostenibilidad será un factor clave en la economía global, asegurando su viabilidad a largo plazo.
La transición hacia una empresa descarbonizada no ocurre de la noche a la mañana, pero hay pasos que las empresas pueden dar para comenzar este camino y algunas claves para la descarbonización de las empresas que pueden facilitar el objetivo.
Para avanzar en la descarbonización, las empresas deben:
En definitiva, la descarbonización de la industria es un proceso fundamental para garantizar un futuro más sostenible y reducir los impactos negativos del cambio climático. Para las empresas, adoptar medidas de descarbonización es una responsabilidad social y ambiental y, sobre todo, es una oportunidad estratégica para mejorar su competitividad, reducir costes y acceder a nuevos mercados.
Por ello, Veolia está comprometida con la descarbonización a través de su proyecto GreenPath, una solución integral diseñada para ayudar a las empresas a reducir sus emisiones de carbono. Abarca la implementación de tecnologías de eficiencia energética, el uso de energías renovables y la optimización de procesos industriales.